En el año
1850 apareció un franciscano de nombre Juan Abad en el poblado de Olmos
realizando labores piadosas y religiosas. En esos años la población de Olmos
vivía atemorizada por un volcán que se encontraba en el cerro Chalpón lo cual toda la zona del pueblo
amanecía nublada de cenizas, pues la población le contaba los temores que
tenían al Franciscano, es entonces donde el Padre Abad decide instalarse en el
cerro de Chalpón para realizar oraciones a Dios para que aplacara la furia de
la naturaleza. Es ahí donde el Padre tiene un sueño en el cual el Altísimo le
encomendaba confeccionar una cruz de madera y la colocara en una gruta del
cerro la cual iba a ser la protectora de Olmos. Pues el Padre la confeccionó de
madera de Guayacán. Él bajaba todos los sábados al poblado de Olmos a realizar
el santo Rosario y a predicar la Palabra de Dios, haciéndolo también en Motupe.
Es así que
el Padre Abad o llamado por algunos Juan Ramón Rojas llega donde una familia de
olmanos de apellido Adrienzen y les comentaba que el día que el desapareciera
buscaran a las cruces que había dejado en el cerro de Chalpón.
Tiempo después
un prófugo de apellido Barrios huyendo de las justicia se internó en las inmediaciones
del Cerro Chalpón. Al mirar en una de las grietas pudo observar una cruz casi
oculta y para recordar este hallazgo cortó un árbol de overo como señal, pero
por falta de alimentos el prófugo abandona el cerro dirigiéndose al despoblado
de Olmos, pero con tan mala suerte que fue apresado por las fuerzas del orden.
Ya en el puesto policial, el Prófugo confesó que había visto en una gruta del
cerro Chalpón a la Cruz que había dejado el Padre Abad y que el mismo les
enseñaría el camino, pero no le creyeron y este fue victimado.
El Comisario de nombre Darío Noé quien había capturado a Barrios en
reunión de amigos en el pueblo de Olmos, comentó la versión de Barrios. Con la
leyenda que se voceaba de que el Padre Guatemala había dejado tres cruces para
los Pueblos de Olmos, Motupe y Penachí, varias personas empezaron la búsqueda
de la cruz.
En 1936, Don Eulogio Torres Aldana en una conversación con Isaías
Olazábal Nunura y Augusto Bellodas Facio, les comentó que el soñaba con la Cruz
que había dejado el Padre Abad en el cerro Chalpón, luego de este comentario
deciden buscar al sagrado madero. Ocho años más tarde, sus esfuerzos tuvieron
el fruto esperado, pues un 25 de agosto
de 1944 en el espeso bosque del cerro divisaron la Cruz de Guayacán en una
gruta y acostada. Los tres amigos de inmediato bajaron al pueblo para dar a
conocer el hallazgo. De inmediato los pobladores fueron notificados del
hallazgo y fue tanta la alegría del pueblo que las campanas de la iglesia no
cesaban de tocar cuando el sagrado madero fue traído.
Se dice que a la altura de los brazos de la Cruz
se apreciaba la silueta del padre Abad quien estaba arrodillado, pero la imagen
del Padre desapareció por lo que los devotos colocaron anillos de plata en el
madero de la Cruz.
La Festividad religiosa de la Santísima Cruz de
Olmos se celebra en el distrito de Olmos provincia y Región Lambayeque, en los
meses de febrero (fiesta de medio año) y en agosto (fiesta de año) siendo los
días centrales 24, 25 y 26, atrayendo a miles de fieles de diversas partes del
Perú y Mundo.